Coronavirus y Mindfulness
La conexión entre la mente y el sistema inmune
La pandemia y la vulnerabilidad:
La casuística internacional nos muestra que las personas más vulnerables ante el COVID-19 son aquellas de la tercera edad, incluyendo mujeres en postmenopausia y adultos con enfermedades crónicas como diabetes, hipertensión, problemas cardíacos, cáncer, entre otras. En este contexto, el autoaislamiento y el estricto cumplimiento de medidas de higiene se convierten en nuestras principales armas de defensa.
El impacto emocional de la pandemia:
El cambio abrupto en nuestra rutina diaria ha generado un impacto emocional significativo en la población. Sentimientos de miedo, temor y angustia son comunes en estos tiempos. Como médico, recibo constantes consultas de pacientes que buscan herramientas para sobrellevar esta situación.
Si bien cada individuo posee sus propias capacidades para afrontar situaciones adversas, estoy convencido de que la práctica del Mindfulness (atención plena) se convierte en una herramienta invaluable para enfrentar la realidad de manera más serena. El Mindfulness nos permite alcanzar un estado de relajación que activa nuestro sistema parasimpático, el cual a su vez nos equilibra y fortalece nuestro sistema inmunológico.
En un mundo que enfrenta una crisis sanitaria sin precedentes, la serenidad mental se convierte en un escudo esencial para proteger nuestra salud. El Mindfulness, como herramienta para alcanzar la calma y el equilibrio, nos permite fortalecer nuestro sistema inmunológico y afrontar la realidad de manera más resiliente. Recuerda que no estás solo en esto. Busca apoyo profesional si lo necesitas y no dudes en incorporar prácticas como el Mindfulness en tu vida diaria para cultivar la serenidad que tu mente y cuerpo necesitan.
En base a la revisión de los ensayos realizados por Black y Slavich, citados por Jorge Benito en su excelente e ilustrativo video , podemos inferir entonces que las personas más susceptibles al virus, podrían beneficiarse auto mejorando su sistema inmunológico, con tan sólo dedicar un aproximado de 10 minutos al día como mínimo a la práctica de la meditación plena, Mindfulness.